No aceptará nada en desagravio, ni se contentará con muchos regalos.
Un marido ofendido no acepta nada a cambio; no se da por satisfecho ni con todo el oro del mundo.
No hará caso de compensación alguna; aunque prodigues regalos, no aceptará.
/nNo aceptará ningún rescate, /nNi querrá perdonar, aunque multipliques los dones.
No aceptará ninguna restitución; ni querrá perdonar, aunque multipliques los dones.