En tus decretos hallo mi deleite, y jamás olvidaré tu palabra.
Mi mayor placer son tus mandatos; jamás me olvido de ellos.
En tus preceptos tengo mis delicias, no olvido tu palabra.
/nMe regocijaré en tus estatutos; /nNo me olvidaré de tus palabras.
Me deleitaré en tus estatutos: No me olvidaré de tus palabras.