Aunque los gobernantes se sienten y hablen contra mí, tu siervo meditará en tus leyes.
Aun los poderosos se confabulan contra mí, pero este siervo tuyo medita en tus decretos.
Los poderosos hacen planes contra mí, pero yo sólo pienso en tus enseñanzas.
Aunque los príncipes hablen en sesión contra mí, tu servidor medita en tus preceptos.
/nPríncipes también se sentaron y hablaron contra mí; /nMas tu siervo meditaba en tus estatutos,
Príncipes también se sentaron y hablaron contra mí: Mas tu siervo meditaba en tus estatutos.