Tú, oh Dios, nos has puesto a prueba; nos has purificado como a la plata.
Tú, Dios mío, nos pusiste a prueba, para ver si éramos fieles.
Tú nos probaste, oh Dios, nos purgaste, cual se purga la plata;
/nPorque tú nos probaste, oh Dios; /nNos ensayaste como se afina la plata.
Porque tú nos probaste, oh Dios: Nos refinaste como se refina la plata.