(Al músico principal. Salmo de David. Cántico) Dios se levantará, y se dispersarán sus enemigos; huirán de su presencia los que le aborrecen.
Que se levante Dios, que sean dispersados sus enemigos, que huyan de su presencia los que le odian.
¡Vamos, Dios mío, dispersa a tus enemigos! ¡Haz que huya de tu presencia esa gente que te odia!
= Del maestro de coro. De David. Salmo. Cántico. =
/nLevántese Dios, sean esparcidos sus enemigos, /nY huyan de su presencia los que le aborrecen.