Y cuando piden, no reciben porque piden con malas intenciones, para satisfacer sus propias pasiones.
Y cuando piden, lo hacen mal, porque lo único que quieren es satisfacer sus malos deseos.
Pedís y no recibís porque pedís mal, con la intención de malgastarlo en vuestras pasiones.
Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.
Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.